Noticias

Jan 29, 2024

Westerly Konsort, un velero de quilla de crucero seguro para la navegación costera

Anne-Hélène vive en Crozon-Morgat, Finisterre, con su hijo de 11 años. Ella

Anne-Hélène vive en Crozon-Morgat, Finisterre, con su hijo de 11 años. Pasa los veranos en su barco, navegando arriba y abajo de la costa de Bretaña.

Como navegante sola, buscaba un barco que le diera la confianza para navegar con dos personas, ya que su hijo tenía solo 8 años en ese momento. Después de tener un Love Love y luego un Sangria, eligió un Westerly Consort de 1982 de 29 pies. "Estaba buscando un 30 pies para navegar solo con mi hijo. Papá es capitán de marina mercante y trabaja todo el verano. Aprovecho para alquilar mi casa e instalarme en mi barco para la temporada de verano. Necesitaba un barco en el que me sentí cómodo. Excepto que en Francia, los modelos son más del tipo de regata-crucero. Pero mi programa tiene que ver con la seguridad, el crucero y la habitabilidad".

Anne-Hélène recurrió a un First 30, pero era demasiado agitado. Cuando no pudo encontrar un barco que se adaptara a sus necesidades, se puso en contacto con un amigo en Inglaterra. Ex entrenador de la Federación Inglesa de Vela, le envió una foto de un Westerly Konsort y le dijo que tenía todo lo que buscaba. Ella explica: "Nunca había oído hablar de esta marca. Tenía ideas preconcebidas. Fui al sitio web de una asociación de propietarios de Konsort y encontré un anuncio en Arradon, Morbihan. El barco estaba seco en Crouesty y pertenecía a un ex violonchelista de la BBC".

Su exmarido la visita exteriormente y valida el modelo. Como explica Anne-Hélène, "el muestreo occidental, incluso si está retorcido, no se rompe". Ella fue allí con su hijo, quien la visitó con estrellas en los ojos. Después de curiosear con el dueño, está encantada. Pero solo contaba con un presupuesto de 10.000 euros, y su barco de 1982 construido por el astillero inglés Gosport se anunciaba en 15.000 libras esterlinas, o 17.500 euros. Al final, el trato se cerró por 15.000 euros. Anne-Hélène y su hijo serán propietarios de Windrush en 2020.

En el interior, hay un pique de proa con dos literas, una cabina de popa en el lado de babor con una litera para ataúdes y un salón con una cocina debajo. Su modelo es una versión mejorada, por lo que el inodoro incluye ducha, pero no mueble de lavabo. El lavabo está enfrente, al lado del armario.

Totalmente equipada con electrónica, también tiene un hidroavión. En cuanto al juego de velas, Windrush luce un génova de los años 80 muy completo, una vela mayor, una vela ligera de popa y un traje de crucero, antepasado del spinnaker asimétrico, que aún no ha probado. Anne-Hélène explica: "Compré un calcetín el año pasado para probarlo, pero estoy sola a bordo. Tengo que averiguar cómo hacerlo. También tengo un estay bajo, pero no tengo velas para aparejar. No es mi programa de navegación de todos modos".

En 2021, madre e hijo navegan hasta Hoedic. En 2022, descubren Jersey, Guernsey y Sark. En el verano de 2023, planean regresar a Hoedic. A los 11 años, 4 o 5 horas de navegación son más que suficientes. Como explica Anne-Hélène, Windrush es un yate de dos barcos, lo que les facilita el desembarco: "En Hoedic, en Port Lacroix, el antiguo puerto al otro lado de la isla, puedes relajarte. Está protegido por dos diques "También es un buen lugar para conocer gente. La gente solía venir a hablar con nosotros cuando estábamos en la playa".

Orgullosa de su barco, Anne-Hélène solo tiene cosas buenas que decir sobre él: "No es un barco de ceñida, pero tampoco es un desastre. Adelanté a un First 30.5 en Audierne Bay con 15 nudos de viento. Es un 5- Barco de quilla de 1,000 toneladas, con un sampleo muy fuerte. A favor del viento, es genial! Es un barco ancho, 3,25 m. Con sus dos quillas, es muy plano en el agua, por lo que vamos rápido. Es muy rígido con la vela, con una altura bastante alta, mástil muy robusto. Antes de rizar, puede sostener 20 nudos sin estremecerse o perder la forma. Es un barco inglés, y son marineros. Navegan. Los barcos del oeste están equipados para navegar. Están diseñados para ser aptos para navegar. El Canal de la Mancha es su patio de recreo, ¡incluso sola a bordo!"

Cuando se le pregunta sobre las ventajas de su barco, Anne-Hélène es inequívoca: habitabilidad, seguridad gracias a la bañera muy profunda. La barandilla está a popa y la botavara pasa por encima de la cabeza. Y añade: "Es un barco muy marinero. Tengo confianza en él". En cuanto a las desventajas, es mucho más complicado encontrar alguna, como se divierte Anne-Hélène al concluir: "No va tan rápido como un Pogo". , ¡eso es seguro! Pero no lo encuentro una desventaja. Me encanta mi barco".

Al final, el único inconveniente fue bastante logístico. El puerto de Morgat no está equipado para transportar las biquilles, y Anne-Hélène está obligada a utilizar la grúa, que se factura dos veces, una por sacar el barco del agua y otra por ponerlo en el muelle. También ha estado pensando en una solución para dejar Windrush en el agua tanto como sea posible, probando para-fouling, un barniz a base de grafeno libre de biocidas.